La ideología del transgenerismo es totalitaria (3/3)

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Padre Shenan J. Boquet
Presidente
Human Life International

El transgenerismo y el totalitarismo

Historias como éstas y peores siguen surgiendo con más rapidez que las que puedo escribir acerca de ellas.

Este mes (de marzo de 2019), por ejemplo, nos enteramos de una madre católica con cinco hijos en el Reino Unido a quien la policía está investigando por “malgenerar” (“misgendering”) o nombrar con el “género equivocado” al hijo de un activista transgénero. Este activista mandó a castrar a su hijo de 15 años de edad en Tailandia, ya que el procedimiento es ilegal para un niño en el Reino Unido [4].

También en el Reino Unido durante este mismo mes, nos enteramos de unos padres que se opusieron a que su hijo autista le recetaran “terapia hormonal” para “cambiar” de sexo. Luego de que el hijo dijera a la escuela que sus padres no iban a permitir este “tratamiento”, la escuela reportó a los padres a los servicios infantiles del Estado acusándolos de ser “emocionalmente abusivos”. Luego amenazaron a los padres de que si no permitían que su hijo se sometiera al “cambio” de sexo que éste les sería quitado y entregado a un orfanato. Según la publicación The Daily Mail, el año pasado (2018), por lo menos tres niños les fueron arrebatados a sus padres y colocados en orfanatos porque sus padres se opusieron al “cambio” de sexo [5].

Jordan Peterson (el famoso psicólogo canadiense) tenía toda la razón. Hay un creciente aspecto totalitario en la ideología de “género”. Cualquiera que obligue a mujeres violadas a compartir habitaciones con hombres, que arrebate hijos a sus padres porque éstos se oponen al “cambio” de sexo debido al daño tan grande que dicho cambio causa, que dé hormonas artificiales y mutile genitales a niños, que no le importe meter en la cárcel a una madre de cinco hijos por declarar la verdad biológica, y que declare que la verdad no es una defensa válida y que la evidencia no es bienvenida en un juicio, todo esto en nombre de una ideología recientemente fabricada que no tiene ninguna prueba científica sino que consiste en un conjunto de dogmas estrafalarios, comparte ciertas y evidentes características con los que perpetraron las peores violaciones a los derechos humanos del siglo pasado. Considero que existen todas las razones del mundo para anticipar que mientras más poder estos ideólogos adquieran, más descarado e injusto será su ejercicio de ese poder.

Nancy Pearcey, una académica que se ha enfocado en el tema del transgenerismo, ha repetido recientemente las advertencias de Peterson durante una entrevista. “Cualquiera que haya leído el libro El Archipiélago de Gulag de Solzhenitsyn o cualquier libro como ése, sabe que los sistemas totalitarios a menudo comienzan con una irresistible manera de hablar, diciendo a la gente lo que deben o no decir”, observó Pearcey. “Y si le puedes decir a la gente qué decir u obligarla a decirlo, eventualmente podrás controlar lo que piense”.

Y siguió diciendo: “Si le robas a la gente el lenguaje que expresa sus verdaderas convicciones, y si le exiges que digan cosas en las cuales no creen, eso eventualmente les trastornará su mentalidad. Eventualmente [este tipo de coerción] cambia la mentalidad de la gente”. En otras palabras, los ideólogos del transgenerismo totalitario se han involucrado en un tipo de manipulación psicológica en la cual el propósito del manipulador es que la gente se cuestione su propia sanidad mental. Al exigir que cambiemos nuestra manera de hablar – y, de hecho, nuestra manera de pensar – acerca de una de las categorías más importante y evidente por sí misma de la realidad – el sexo biológico – los ideólogos del “género” están socavando el fundamento mismo de la razón.

En la entrevista, Pearcey contrastó el totalitarismo y el autoritarismo. Mientras que los estados autoritarios lo que quieren es poder, “no les importa mucho lo que la gente haga en su vida privada”. Pero, por otro lado, un estado totalitario “es aquel que quiere controlar tus propios pensamientos. Quiere controlar tu vida interior”. Este totalitarismo ya está presente en países como Canadá – alertó la académica – y está en el umbral mismo de nuestras puertas aquí en EEUU [6]. Según los casos que he contado antes, en éste y otros artículos anteriores, no veo cómo podamos decir que Pearcey no tenga razón.

Estar advertido es estar previamente armado (en el sentido de conocer la verdad, se entiende). Mucha gente que enfrenta el extremismo de “género” sufre la tentación de doblegarse, porque saben que los ideólogos del transgenerismo no vacilarán en hacerles la vida miserable. Sin embargo, cada acto de capitulación envalentona a estos ideólogos. Caroline Farrow – la madre de los cinco hijos mencionada arriba – ha dicho que está dispuesta a ir a la cárcel para proteger su derecho a la libre expresión. Lo mismo ha dicho Jordan Peterson. ¿Estamos nosotros dispuestos a ponernos en pie en pro de la verdad?

 

Notas:

[4]. https://www.bbc.com/news/uk-england-surrey-47638527.

[5]. https://www.dailymail.co.uk/news/article-6817935/Autistic-boy-taken-care-school-reports-parents-refusing-allow-sex-change-treatment.html.

[6]. https://www.lifesitenews.com/news/transgenderism-is-leading-us-towards-totalitarianism-the-van-maren-show-episode-9.